Ejercicio

Todos saben que el ejercicio es saludable, pero, durante el embarazo, ¿es recomendable?, ¿qué tanto se puede hacer?

Si tu embarazo lleva un curso normal y no es de alto riesgo, adelante: disfruta tu cuerpo y ponte en movimiento. Incluso si antes de embarazarte no tenías integrada a tu vida una rutina de ejercicio físico, comenzar a realizarla te ayudará a mantenerte sana durante todo el proceso de gestación. Solo toma en cuenta que debes empezar a hacerlo de forma paulatina, poco a poco.

Lo ideal es iniciar con 10 a 15 minutos diarios, y pasadas un par de semanas incrementar el tiempo hasta hacer media hora. Selecciona algo que disfrutes, actividades de bajo impacto como caminata, baile, natación, aqua aerobics y yoga.

Si haces ejercicio al aire libre, recuerda ponerte bloqueador solar, ya que con los cambios que produce el embarazo, la piel se puede manchar más fácilmente.

Mantente hidratada y aliméntate bien. Ten presente que la meta no es bajar de peso, sino conservar sano tu cuerpo y el de tu bebé. No te excedas en la cantidad o la intensidad de ejercicio; no es necesario quedar exhausta. Recuerda que la prudencia en este tiempo, será tu mejor compañera.

Si ya eras deportista y entrenabas con cierta frecuencia antes de embarazarte, lo más probable es que puedas continuar con tu rutina. Si correr es tu pasión, seguramente podrás seguir haciéndolo, a menos de que tu médico te indique lo contrario o te sugiera bajar la intensidad de tus entrenamientos.

Consejos importantes para hacer ejercicio:

• Consulta a tu médico, compártele tus intereses y tu rutina de ejercicios.
• Siempre empieza con un calentamiento.
• Hidrátate continuamente.
• Usa ropa cómoda.
• Evita hacer ejercicios acostada boca arriba, ya que te puedes marear y disminuir la irrigación sanguínea a tu bebé.
• Si te sientes mal, detente. Si te mareas o te falta el aire, significa que te estás excediendo.

Evita ejercicios de alto impacto o que tengan riesgo de caídas como montar a caballo, esquiar o andar en bicicleta.

Los deportes como futbol, beisbol y tennis, pueden exponerte a que te den un pelotazo. No hagas artes marciales ni practiques box.

Después del primer trimestre, y conforme tu panza empieza a crecer, tu centro de gravedad cambia, por lo que tu equilibrio se puede ver afectado. Esto repercute en actividades como andar en bicicleta o los deportes con raqueta, incluso podrían llevarte a tener una caída.

Si al hacer ejercicio sientes que te vas a desmayar, te mareas por demasiado tiempo, tienes hemorragia vaginal, sale líquido o sientes contracciones es importante que llames al médico de inmediato. Lo principal es cuidarte a ti y tu bebé.