La idea de la separación

Cuando se tiene una relación de pareja y se decide dar el paso para vivir juntos, hay grandes planes y expectativas. Quien decide casarse, lo hace pensando que será para toda la vida.

Con el paso del tiempo y la convivencia cotidiana, las parejas se van conociendo más, adaptando y en ocasiones sucede que algunas se van desencantando. Sí, a veces la realidad no es lo que se espera. Hay quienes encuentran facetas realmente oscuras en su pareja y surge la pregunta ¿es algo con lo que puedo vivir?

El cansancio de sentir que hay situaciones que se presentan una y otra vez y que no se logran solucionar, puede llevar a cuestionar si la relación tiene futuro. La sensación de soledad cuando se está en una relación de pareja puede ser terrible. Sentirse abandonado, que no hay equipo, que no existe consideración a las emociones, el abuso físico o psicológico, pueden llevar a deteriorar el amor con el que se inició todo.

Si has llegado a sentir esto y sigues amando a tu cónyuge puede ser momento de pedir ayuda para salvar su relación matrimonial. Acudan a terapia o a una consejería de pareja.

Si ya lo intentaron todo y no logran reencontrarse para vivir en armonía, puede ser que la idea de la separación haya llegado. Háblenlo entre ustedes.

El desencanto y el desamor pueden ser una causa de ruptura, así como también la traición y las mentiras aunque de forma mucho más violenta. En cualquier caso traten de hablarlo con calma.

Consejos para tratar de tomar la mejor decisión

• Haz una lista de todo lo que te gusta de tu pareja y otra de lo que te molesta. Analízalas y observa cuáles factores tienen mayor peso para ti. Enfócate en la lista de lo que te molesta y detecta si hay cosas que te son realmente graves o intolerables. Analiza si has hablado de esto con tu pareja, si le ha interesado mejorar en esos aspectos o van más allá de su buena voluntad.
• Haz otra lista sobre ti, tus virtudes y tus defectos, lo que tu pareja acepta de ti y lo que le molesta. Analiza ambas listas y ve si a tus ojos, hay posibilidades de seguir adelante como pareja.
• Platica de la situación con un par de personas de tu confianza, busca gente que sea lo más objetiva posible, que te pueda ayudar a ver el panorama “desde afuera”.
• Si te parece necesario, busca ayuda de un profesional: psicólogo, terapeuta de pareja, consejero matrimonial, que pueda ayudarte en el proceso de tomar la decisión.