Sé un experto

Conoce y sabe

“El conocimiento es poder”

Francis Bacon

La esencia del liderazgo es el conocimiento, pues nos permite tomar decisiones, integrar a un equipo, establecer y cumplir metas ambiciosas.

Muchas veces lo damos por sentado, pero apreciarlo (y buscarlo constantemente) será un gran sello en nuestro estilo de liderazgo.

El conocimiento es la base del liderazgo. Para que una persona elija un rumbo, guíe a los demás en esa dirección y tome las decisiones correctas, necesita conocer y saber a la perfección tres aspectos:

1. A sí mismo

2. A su equipo

3. El entorno y a la empresa

(También es indispensable el conocimiento de nuestros clientes, como vimos en Pasión por el cliente)

El liderazgo que no esté basado en estos conocimientos profundos, puede desmoronarse, porque no estará arraigado en la realidad, sino en creencias y fantasías.

A continuación, enlistamos los 12 conocimientos que, como líderes, todos debemos desarrollar:

De nosotros mismos

1. Temperamento, carácter y personalidad: Lo primero que debemos conocer son esas características con las que nacimos (temperamento), podemos ser más o menos emotivos, más o menos activos y las emociones pueden resonar en nosotros más o menos tiempo. De la forma en que moldemos esas características, surge el carácter y estas dos combinadas con nuestro aspecto físico, comportamientos y actitudes producen la personalidad.

2. Fortalezas: Hay ciertas habilidades, gustos y aptitudes que nos distinguen de los demás y es fácil reconocerlas: son aquellas que nos encanta hacer, las situaciones en las que nos sentimos cómodos y los intereses a los que les dedicamos más tiempo, están íntimamente relacionados con nuestro temperamento, carácter y personalidad, los hemos desarrollado con el tiempo. Vale la pena que reflexionemos cuáles son todas estas cosas en las que somos buenos porque le pueden dar forma a nuestro tipo de liderazgo.

3. Áreas de oportunidad: Por otro lado, también tenemos situaciones que se nos complican, actividades que preferimos no hacer o que nos producen estrés y sirve tenerlas identificadas, por un lado, para desarrollarlas, pero también para hacer equipo con personas que sean muy buenos en aquellas habilidades en que nosotros no. Como líderes debemos tener un equilibrio en todas nuestras áreas y si bien es cierto que nunca se volverán puntos fuertes, también es verdad que podemos avanzar mucho si nos lo proponemos.

4. Metas personales: Si queremos ser personas con una dirección definida, debemos definir y revisar nuestras metas frecuentemente: qué es lo siguiente que queremos conseguir o hacia dónde nos dirigimos. Pueden ser laborales, familiares, académicas, económicas o deportivas, pero hay que plantearlas y saber cuáles son. Esta es la mejor forma de avanzar, pues el no tener metas nos hará quedarnos en la zona de comodidad.

De nuestro equipo

5. Las funciones de cada uno: Debemos tener claro qué esperamos de los integrantes, qué les toca hacer, qué grado de responsabilidad tienen y hasta qué punto pueden decidir, también debemos estar seguros de que cada quién conoce sus funciones y qué se espera de ellos. Un buen equipo depende de que todas las actividades estén claras y que cada uno desempeñe la suya con responsabilidad.

6. Su aspecto personal: Es importante considerar el lado familiar e interesarnos en él, en sus pasatiempos e intereses, pues siempre debemos recordar que el trabajo solo es una parte de su vida y tienen muchas cosas valiosas que podemos descubrir, también es bueno fomentar lazos de amistad, pues eso siempre fortalece al equipo.

7. Fortalezas y áreas de oportunidad: Así como conocemos estos aspectos de nosotros, igualmente debemos observar a nuestros compañeros y fijarnos tanto en aquello que hacen bien y se les da con facilidad, como en lo que se les dificulta, pues el crecimiento de cada uno de nuestros colaboradores depende de esos dos aspectos. Para conocerlos, debemos observarlos y preguntarles todo el tiempo.

8. Motivaciones y sueños: Si logramos conectar con los demás Socios, descubriremos qué los impulsa a esforzarse y crecer, qué desean alcanzar y qué los hace despertarse cada día y dar su máximo esfuerzo. El conocer esto nos permite ver una nueva faceta e invitarlos a mejorar constantemente, así sabremos qué retos plantearles y qué planes son los adecuados para que sean mejores en el trabajo y al mismo tiempo se acerquen a lo que tanto sueñan.

Del negocio

9. Materia prima: Es fundamental que conozcamos a la perfección cada producto o servicio que ofrecemos y todos sus detalles: características, ventajas, desventajas, especificaciones y excepciones, puede haber una ficha técnica que nos apoye, pero nosotros debemos saberlo ya. Si vamos a hacer una recomendación a nuestros clientes, ellos deben ver que nadie sabe más que nosotros, eso produce confianza.

10. Procesos: Otro aspecto del negocio a dominar son las reglas, procesos y protocolos que se deben cumplir en nuestra tienda, sucursal, centro de distribución, oficina, etc.: saber cuáles son prioritarios, de quién dependen, cuáles son sus especificaciones y, sobre todo, qué hacer en caso de que algo no se cumpla o no salga conforme lo planeado. Esto puede parecer muy técnico, pero como líderes es indispensable que lo conozcamos y seamos expertos en ello.

11. Metas: Debemos conocer hacia dónde se dirige el negocio, tanto nuestra área como todas en conjunto e implementar estrategias para alcanzar el destino propuesto. En este aspecto es importante saber cuáles son los días fuertes, cuáles son las tendencias de moda, cómo hablarle a cada persona (tanto cliente como integrante del equipo) todo enfocado en alcanzar las metas.

12. Entorno y competencia: Hay que recordar que no estamos solos: hay otras empresas haciendo lo mismo que nosotros y también se esfuerzan por ofrecer lo mejor a los clientes, debemos saber qué y cómo lo están haciendo y si les está resultando. Por último debemos conocer nuestro entorno: las situaciones por las que pasa el país, la comunidad y en ellas aprender a leer oportunidades para usar a nuestro favor o amenazas de las cuales prevenirnos.

EJERCICIOS

1

Haz una lista con tus 5 mayores fortalezas y tus 5 principales áreas de oportunidad, después pregúntale a tus compañeros si coinciden contigo.

2

Si tienes una ficha de tus colaboradores, agrégale sus fortalezas y áreas de oportunidad. Si no la tienes, hazla.

3

Analiza si las funciones de cada uno de tus colaboradores, les está ayudando a alcanzar sus sueños. Si no conoces sus sueños, pregúntaselos.

4

Haz una lista de cosas y procesos que te gustaría perfeccionar o aprender de tu Unidad de Negocio y proponte investigar una cada semana.

5

Revisa los principales libros que te podrían ayudar a desempeñar mejor tu trabajo y proponte buscar en Biblioteca Socio el primero de esta semana y empezar a leerlo.

6

Haz un cuadro en el que analices a la principal competencia de tu Unidad de Negocio y el entorno, a partir de eso, detecta qué oportunidades tiene tu equipo de trabajo.

DINÁMICA

Invita a tu equipo a ver una de las siguientes películas:

Di que sí

Di que sí

Pasante de moda

Pasante de moda

El diablo viste a la moda

El diablo viste a la moda

En busca de la felicidad

En busca de la felicidad

Antes de iniciar el trabajo del día discutan las siguientes preguntas:

  • ¿El personaje principal se conoce?
  • ¿El personaje principal conocía bien a los demás?
  • ¿Cuál fue el trayecto del personaje?
  • ¿Dirías que es un líder?, ¿por qué?
  • ¿Qué puedes aprender de los personajes?

¿Conoces a alguien con estas características?

VIDEO


Descubre en este instructivo video, la importancia de conocer las capacidades, fortalezas y personalidad de los integrantes de tu equipo de trabajo.




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Si te apasionó este tema, puedes descubrir más en estos libros de Biblioteca Socio.