Sé un guía

Enseña

“Da un pez a un hombre y le quitarás el hambre por un día, enséñalo a pescar y le quitarás el hambre de por vida”.

Proverbio chino

Un buen líder debe hacer que los miembros de su equipo crezcan y se desarrollen, para conseguirlo es importante compartir con ellos sus conocimientos, habilidades y prácticas; mientras más herramientas tengan, serán más eficientes, tomarán mejores decisiones, resolverán problemas de forma autónoma y, por lo tanto, los resultados del equipo, serán mejores.

Por ello, debemos aprender también a ser mentores y promover el liderazgo en nuestros equipos, incluso al grado de capacitar a nuestros colaboradores para ocupar nuestro lugar, con el entendido de que seguiremos avanzando y ocupando puestos más elevados en la organización. Para conseguirlo, podemos dominar estos puntos:

Recomendaciones para desarrollarla:

1. Ser un mentor: Si estamos al frente de un equipo de trabajo, es porque contamos con competencias o habilidades duras del tema que dominamos: su funcionamiento, detalles, variables, manejos; además poseemos habilidades blandas; cómo tratar con la gente, reaccionar bajo presión, tomar decisiones, trabajar en equipo, etc.

Debemos transmitir estos dos tipos de habilidades a nuestros colaboradores (2), por eso siempre es importante que nos actualicemos y seamos personas de las que pueden aprender, porque al mostrar una habilidad nueva a alguien es cuando más reafirmamos lo aprendido.

2. Explicar el proceso: La esencia de saber ejecutar las cosas está en conocer en qué orden se deben hacer, cuánto tiempo lleva cada una y cuál es prioritaria. Cuando enseñamos, debemos prestarle atención a estos detalles, para que más que hacerlo como robots, nuestros colaboradores entiendan completamente cómo trabajarlo y se involucren. Vale la pena hacer esto antes de practicar, porque les permitirá prepararse para lograr aquello que están aprendiendo.

3. Mostrar cómo se hace: Un chef puede explicarnos una receta, pero solo en la cocina aprenderemos cómo se hace. Lo mismo pasa con nosotros, debemos involucrarnos e ir paso a paso de la mano de nuestros colaboradores (especialmente las primeras veces que hacen algo para transmitirles seguridad). Cuando nos vean hacerlo una parte de su cerebro se activa y aprenden como si ellos mismos lo estuvieran haciendo.

4. Crear ambiente de aprendizaje: Cuando enseñamos, debemos invitar a las personas a estar abiertas a adquirir nuevos conocimientos, por lo tanto es aconsejable propiciar que se animen a intentar cosas nuevas sin miedo a equivocarse. Para lograrlo conviene vivir y promover actitudes como empatía, confianza, reconocimiento, sentido del humor, participación, todo esto reforzado por rutinas que aporten seguridad y fomenten la participación.

5. Aclarar dudas: Cada persona aprende de modo diferente y entiende distintas cosas, por eso debemos siempre asegurarnos de que no queden inquietudes. Dependiendo de la personalidad del aprendiz, puede ser más abierto al expresar sus dudas o tenemos que indagar nosotros si entendió todo, un buen consejo es pedirle que nos explique para descubrir si en verdad comprendió.

6. Proveer herramientas: Todo el tiempo debemos asegurarnos de que nuestros colaboradores tengan todo lo necesario para realizar bien su trabajo y cerciorarnos de que lo sepan usar bien. Este aspecto también incluye que tengan un lugar donde comer, que los baños estén limpios, que haya buena iluminación y aire acondicionado, en caso de ser necesario.

7. Apoyar: Como líderes, siempre debemos estar cerca de nuestros colaboradores para asistirlos en caso de que lo necesiten, mientras adquieren la confianza de hacer las cosas por sí mismos. Esto no quiere decir que les estemos diciendo qué hacer o que hagamos las cosas por ellos, nuestro papel es más bien el de un guía o un director técnico, que instruye a los jugadores sobre la estrategia en general pero jamás se mete a jugar por ellos.

8. Tener paciencia: El aprendizaje es un proceso que requiere mucha práctica antes de dominar los conocimientos, tener esto en mente nos permite estar tranquilos mientras nuestros colaboradores aprenden. Algo que compensa las fallas de las personas que van iniciando, es el entusiasmo y las ganas de aprender. Irónicamente, desesperarnos y presionar lleva a las personas a cometer más errores.

9. Transmitir seguridad: El conocer muy bien los detalles del negocio y estar experimentados, nos permite conservar la calma incluso en las situaciones más complicadas, esto da ejemplo a nuestros colaboradores, quienes pueden ser más susceptibles a ponerse nerviosos o preocuparse. Cuando les ayudamos a las demás personas a sentirse seguras, perderán el miedo a equivocarse y lo intentarán hasta dominar el tema.

10. Celebrar avances: Cuando se trata de aprender, cada progreso cuenta, por lo que cuando los colaboradores a los que les estamos enseñando logren algún avance, debemos reconocérselo, eso los motivará a seguir avanzando.

11. Corregir oportunamente: También podrá ocurrir que quien está aprendiendo tome una decisión equivocada, en ese caso lo más prudente es corregir en el momento (a solas) explicar el origen de la falla y señalar qué elección hubiera sido mejor. De esta forma evitamos desmotivarlos, pero les indicamos cómo pueden seguir mejorando.

12. Desarrollar líderes: Debemos encargarnos de que todos en nuestro equipo aprendan y practiquen las cualidades de liderazgo, que sean capaces de creer en sí mismos y vean su verdadero potencial, esta confianza que les inyectará saber que ellos también pueden desarrollar estas habilidades, los mantendrá muy motivados.

EJERCICIOS

1

Si entre tus funciones está enseñar, asegúrate de que sabes todo del tema y conoces los procesos completos, si no es una función tuya, piensa en qué más puedes aprender y proponte enseñárselo, (puede ser alguna habilidad del liderazgo. Todos podemos enseñar).

2

Practica la paciencia y cuando estés enseñando algo repasa el proceso hasta que a la otra persona le quede claro.

3

Escribe tres ideas que puedes poner en práctica para que en tu área de trabajo haya un ambiente de aprendizaje.

4

Pregunta en tu área si todos cuentan con todas las herramientas necesarias para realizar sus labores y encárgate de ayudarles a conseguirlas.

5

Si tienes un compañero que vaya aprendiendo, celebra cada avance para ayudarle a construir seguridad.

6

Cuando alguien cometa un error o equivocación, ayúdale a transformarlos en aprendizaje, preguntándole. ¿Qué bueno puede salir de esto?

DINÁMICA

Te recomendamos realizarla antes de iniciar las actividades del día cuando tu equipo de trabajo esté reunido.

  • Cuando tu equipo esté reunido, hagan una lista de al menos 5 temas relacionados con el trabajo o con liderazgo que a todos les gustaría aprender y propongan a personas que los enseñen una vez por semana.
  • Pueden ser sesiones de 10 a 15 minutos, lo importante es que aprendan a sintetizar, a explicar a los demás y a resolver sus dudas.
  • Cuando hayan terminado de exponer, el equipo les puede dar su opinión sobre cómo estuvo su clase.

¿Quién de tus compañeros siempre enseña a los demás?

VIDEO

Es indispensable crear interés en la gente y producir un ambiente de aprendizaje, ve cómo lo hace el profesor de este increíble ejemplo.