Forma un equipo inigualable

Integra y colabora

“La unión hace la fuerza… Cuando hay integración y colaboración, cosas increíbles se pueden alcanzar”

Mattie Stepanek

En cada organización hay muchas personas que realizan diversas funciones, pero que estén juntas no garantiza su funcionamiento como un equipo. Lograr la integración y colaboración conjunta es una labor del líder que comienza con una idea clara de cómo deben interactuar, e implica transmitir el planteamiento de que son una unidad y solo así pueden funcionar.

Descubre qué hay detrás de los mejores equipos, aplícalo en tu lugar de trabajo para alcanzar mejores resultados y tener un ambiente agradable.

La diferencia entre un equipo de trabajo y un grupo de personas (miembros de una iglesia, pasajeros de un avión, un salón de clases, personas que trabajan juntas), es que el primero tiene objetivos comunes, es productivo, eficiente, tiene un alto nivel de comunicación, las habilidades de los integrantes son complementarias, está integrado, coordinado y todos colaboran para alcanzar resultados extraordinarios.

Los equipos no surgen espontáneamente, un líder sabe esto y toma todas las medidas necesarias para crear un ambiente de colaboración en el que cada integrante se sienta motivado a dar lo mejor de sí con la intención de que el equipo alcance mejores resultados. Los siguientes elementos son indispensables para propiciar el ambiente ideal:

1. Conocer a los integrantes – La clave para formar un equipo invencible es saber cómo es cada uno de los colaboradores (sus conocimientos, habilidades y áreas de oportunidad), para decidir qué hará, cómo se relacionará con sus compañeros, cómo ayudarlo a crecer, etc. Por eso, es muy importante ser cercanos, hacerles preguntas de todo tipo y observarlos; mientras mayor sea nuestro conocimiento de ellos, mejor será nuestra relación, además se involucrarán más con un líder que les demuestra interés.

2. Transmitir sentido de unidad – Debemos comunicar constantemente a nuestros colaboradores, que somos un equipo con una misma finalidad y estamos ahí para apoyarnos, por lo que es necesario que cuenten con nosotros cuando lo necesiten. Esto les permitirá avanzar mucho más rápido y alcanzar lo que se propongan. Algunas formas de conseguirlo es hablar con frecuencia de “nosotros” y “nuestros objetivos”, realizar trabajo en conjunto y dinámicas de integración.

3. Plantear objetivos comunes – La gente tiende a unirse para alcanzar objetivos claros que al mismo tiempo aporten beneficios comunes y representen un reto personal, por eso es muy importante decidir las metas del equipo, pueden ser comerciales (ventas), personales (reducir el número de faltas) o de convivencia (disminuir la cantidad de malos entendidos). Es importante que todos se involucren en alcanzarlos para que se sientan comprometidos con ellos y los pongamos en un lugar donde todos los vean para recordarlos.

4. Asignar tareas y posiciones – La parte práctica de alcanzar las metas del equipo consiste en dividir las tareas y elegir a las personas que las realizarán. Cada labor y puesto están relacionados con diferentes tipos de personalidad y niveles de conocimiento, asignar personas acordes a las funciones permitirá que cada uno se concentre en lo que sabe hacer. A los colaboradores con más experiencia, les podemos pedir que capaciten o supervisen a los que tienen menos experiencia para que aprendan a tener alguien a su cargo.

5. Ser equitativos – Si las metas son comunes, entonces el equipo debe alcanzarlas junto (cada uno desde su posición), con una distribución de las funciones y tareas específicas acorde al puesto, capacidades y experiencia de cada uno y como consecuencia, diferentes sueldos. Debemos asegurarnos de que las personas se sientan cómodas con las funciones que realizan.

6. Ser justos – Va de la mano con ser equitativos y es la certeza que tienen todos de ser tratados de la misma manera, con condiciones de trabajo iguales: los reconocimientos, amonestaciones, horarios, permisos, vacaciones, etc., deben coincidir con lo estipulado por la organización. Un líder evita favoritismos y predilecciones, pues sabe que un trato justo permite que las personas se involucren completamente con sus labores y con el equipo.

7. Tomar en cuenta opiniones e ideas – Una de las habilidades del líder es la toma de decisiones, pero el mejor complemento es que estemos abiertos a la retroalimentación, pues los demás tienen perspectivas que enriquecerán las decisiones. Además, esta actitud fortalece el sentido de integración, si estamos dispuestos a escucharlos, ellos sentirán la confianza de acercarse a nosotros, de abrirse y decir lo que en verdad piensan.

8. Mediar - Es natural que en los equipos de trabajo haya fricciones, pues cada integrante tiene una forma diferente de ver el mundo, lo importante para mantener la armonía es aprender a resolver esas situaciones. El primer paso es escuchar a todas las personas involucradas y entender tanto sus expectativas como emociones. Después, detectar la confusión o malentendido y por último llegar a una solución con la que todos estén de acuerdo.

9. Informar – La información es un recurso esencial para trabajar, nos ayuda a tomar mejores decisiones y resolver problemas, por eso debemos brindar a nuestro equipo los datos necesarios para realizar su trabajo de forma eficiente. Después de juntas con tus superiores, reúnete con tus colaboradores para transmitirles todo lo que deban saber.

10. Fomentar el trabajo en equipo – Como líderes tenemos la función activa de trabajar como una sola entidad y que los integrantes estén coordinados y organizados Asignar tareas conjuntas, organizar lluvias de ideas, convivios y cualquier cosa que les permita conocerse y trabajar unidos.

11. Celebrar la colaboración – Muchos líderes tienden a resaltar a sus elementos “estrella”, lo cual los incentiva individualmente, pero promueve la división, nosotros debemos enfocarnos en celebrar que nuestros elementos actúen como un equipo: colaboren, se apoyen, avancen y alcancen juntos las metas grupales. Este enfoque cambia toda la dinámica y la interacción entre las personas, pues se dan cuenta de que vamos todos juntos hacia nuestras metas.

12. Colaborar con otras áreas – Nuestros equipos de trabajo, son solo parte de un equipo más grande, por eso es importante que sepamos crear sinergia* con otros líderes, un gran ejemplo es la convivencia que se da entre Tiendas Elektra y Sucursales de Banco Azteca. En ese sentido, nosotros nos convertimos en un ejemplo para nuestros compañeros, si ven que nosotros les facilitamos la vida a otros equipos, entre ellos harán lo mismo.

*Cooperación que permite lograr mejores resultados juntos de lo que lograríamos solos.

EJERCICIOS

1

Analiza si estás tratando a todos equitativamente (puedes pedirle retroalimentación a tu equipo) y si no fuera así, crea una estrategia para lograrlo.

2

Haz una sesión de preguntas y respuestas con tus compañeros para resolver todas las dudas que tengan del negocio, de la organización del equipo y de su funcionamiento en general y resuélvanlas juntos (te sorprenderá la cantidad de cosas que crees que saben pero ignoran).

3

Al menos una vez por mes organicen una convivencia en la que platiquen de cosas personales para conocerse mejor, háganlo especialmente cada vez que llegue un nuevo integrante al equipo.

4

Califica del 1 al 10, qué tanto colaboras con otras áreas y establece una estrategia con tu equipo para elevar el número.

DINÁMICA

Te recomendamos realizarla antes de iniciar las actividades del día cuando tu equipo de trabajo esté reunido.

  • Reúnanse antes de iniciar el trabajo de la semana y establezcan la misión del equipo (que les dé sentido de unidad) y 3 objetivos comunes que les ayuden a alcanzar las metas del negocio y pónganlos a la vista de todos.
  • Organiza una lluvia de ideas con tu equipo para descubrir formas en las que se pueden integrar más y colaborar mejor e implementen aquellas que mejor puedan funcionar.

¿Conoces a alguien que integre tu equipo de trabajo y colabore con todos?

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