Mantén una relación cercana con tu hija
Diciembre, 2017
La adolescencia es una etapa de la vida que puede causar temor, pero también es una época muy bonita y esperada por tu hija. Como padre o madre de una quinceañera adolescente, sentirás que habrá momentos que te rebasan, pero si estás preparado y consciente de que es solo una etapa, podrás guiarla en el camino.
La comunicación es algo que no se puede perder, así que es muy importante que trates de pasar tiempo con ella y detectes los momentos oportunos para platicar de sus cosas sin que se sienta interrogada. Puedes aprovechar cuando la llevas a la escuela o algún trayecto en el transporte; los adolescentes hablan más fácil si no tienen que mirar a la cara.
Respeta su espacio propio, para tu hija su habitación es un lugar sagrado. Tal vez puedan acordar que si tu tocas la puerta antes de entrar ella no se encierre con seguro o llave.
Dile que la quieres. ¡Es importante y necesario, aunque su respuesta sea una especie de mmmh! Ten por seguro que su corazón escucha y siente.
Dale la oportunidad de ser responsable y déjale tareas para que sepa que tiene la confianza de sus padres. Dale lo justo. A veces pide para saber hasta dónde puedes llegar.
Inclúyela en la vida familiar, tanto en discusiones, alegrías y preocupaciones de la familia.
Cumple las promesas, buenas y malas. Ella necesita saber que puede contar con sus padres y también conocer los límites.
Haz un frente común con toda tu gente cercana y de confianza, como tíos y abuelos. Esto es necesario para no dar mensajes contradictorios.
Comparte con ella tus sentimientos, alegrías y tristezas. Ella necesita saber que sus padres también sienten.
Demuéstrale la fe que tienes en ella; confía en sus decisiones y aprende a escucharla sin emitir juicios si no te los pide; a veces, simplemente necesita ser escuchada. Pon toda tu atención y dale su importancia cuando te platique sus problemas. Trata de ayudarla y comprenderla.
