COVID-19

Es una enfermedad infecciosa causada por un coronavirus descubierto en diciembre de 2019 en Wuhan, China. Una persona puede tardar hasta 14 días en mostrar síntomas de esta enfermedad, a lo que se conoce como periodo de incubación.

Se transmite de una persona infectada a otra a través del aire, al toser o estornudar, al tocar o estrechar la mano de una persona enferma, o al tocar un objeto o superficie contaminada con el virus y luego tocarse la boca, la nariz o los ojos antes de lavarse las manos.

Una persona puede contraer COVID-19 al tener contacto con otra que esté infectada por el virus. La enfermedad se propaga de persona a persona a través de las gotículas procedentes de la nariz o la boca que salen despedidas cuando un infectado tose o exhala. Estas gotículas caen sobre los objetos y superficies que rodean a la persona, de modo que otros pueden contraer COVID-19 si tocan estos objetos o superficies y luego se agarran ojos, nariz o boca. Por eso es importante que mantengas más de 1 metro y medio de distancia.

El virus se contagia con mayor facilidad cuando una persona infectada presenta síntomas, pero también es posible contagiar antes de que existan señales.

Recordemos también que hay asintomáticos que no presentan síntomas pero si pueden contagiar a otras personas, es por eso que debemos seguir siempre las medidas preventivas como lavarse las manos frecuentemente y no tocarse el rostro.

El riesgo de contraer COVID-19 de alguien que no tenga ningún síntoma es muy bajo. Sin embargo, muchos que lo adquieres, solo presentan síntomas leves. Esto es particularmente cierto en las primeras etapas de la enfermedad. Por lo tanto, es posible contagiarse de quien por ejemplo, solamente tiene una tos leve y no se siente enfermo.

• Lávate las manos a fondo y con frecuencia usando un desinfectante a base de alcohol o con agua y jabón.
  ¿Por qué? Lavarse las manos con agua y jabón o usando un desinfectante a base de alcohol mata los virus que pueda haber en sus manos.
• Mantén una distancia mínima de 1 metro y medio entre tú y cualquier persona que tosa o estornude.
  ¿Por qué? Cuando alguien tose o estornuda, despide por la nariz o por la boca unas gotículas de líquido que pueden contener el virus. Si estás demasiado cerca, puedes respirar las gotículas y con ellas el virus de COVID-19.
• Evita tocarte los ojos, nariz y boca
  ¿Por qué? Las manos tocan muchas superficies y pueden recoger virus. Una vez contaminadas, pueden transferir el virus a los ojos, la nariz o la boca. Desde allí, el virus puede entrar en tu cuerpo y causarte la enfermedad.
• Tanto tú como las personas que te rodean deben asegurarse de mantener una buena higiene de las vías respiratorias. Eso significa cubrirse la boca y la nariz con el interior del brazo o un pañuelo de papel al toser o estornudar. El pañuelo usado debes desecharlo de inmediato.
  ¿Por qué? Los virus se propagan a través de las gotículas. Al mantener una buena higiene respiratoria estás protegiendo a las personas que te rodean de virus como los del resfriado, la gripe y COVID-19.
• Si tienes fiebre, tos y dificultad para respirar, busca atención médica y llama con antelación.
  ¿Por qué? Llamar con antelación permitirá que tu médico le dirija rápidamente hacia el centro de salud adecuado. Esto también te protegerá y ayudará a prevenir la propagación de virus y otras infecciones.

Usa jabón, de preferencia líquido, talla enérgicamente las palmas, el dorso y entre los dedos durante al menos 20 segundos. Enjuaga completamente y seca tus manos.

Los más habituales son:
Fiebre mayor de 38º, tos seca, cansancio y dificultad para respirar.

Otros síntomas que afectan a algunos pacientes son:

Dolores musculares, congestión nasal, dolor de cabeza, conjuntivitis, dolor de garganta, diarrea, pérdida del gusto o el olfato, erupciones cutáneas o cambios de color en los dedos de las manos o los pies.

Estos suelen comenzar gradualmente.

Cualquier persona sin importar la edad puede presentar la enfermedad.

Las personas adultas mayores de 60 años, embarazadas, en período de lactancia, que padecen diabetes, enfermedades pulmonares o cardiacas crónicas, así como los fumadores o aquellos que están en tratamientos de inmunosupresión tienen más riesgo de desarrollar síntomas del COVID-19.

Sí, el uso de cubrebocas es obligatorio ya que además de ser una herramienta auxiliar para no contagiar a otras personas, es el mejor aliado para cuando se está en espacios cerrados y en lugares donde no se puede guardar la sana distancia.

Es una medida de salud pública adicional que la gente debe adoptar para reducir la propagación del COVID-19, además del distanciamiento social, el lavado de manos frecuente y otras medidas preventivas cotidianas.

El objetivo no es proteger a quien la usa, sino que puede prevenir la transmisión del virus por parte de quien la usa a otras personas. Esto sería particularmente importante en caso de que una persona esté infectada pero no tenga síntomas. Se debe usar cubrebocas cada vez que van a un lugar público. Los tapabocas médicos y de respiración N-95 están reservados para los trabajadores de la salud.

Los niños menores de 2 no deben usar una cubierta de tela para la cara debido a que corren riesgo de asfixia.

No existe evidencia de que el COVID-19 no sobreviva en ciertas condiciones como temperaturas altas o bajas. Ni el calor ni el frío en el ambiente cambian las posibilidades de contagio

Tanto la Organización Mundial de la Salud como la Secretaría de Salud del gobierno de México, brindan información oportuna y confiable.

La póliza cubre todos los gastos médicos relacionados con el COVID-19, siempre y cuando el padecimiento se haya diagnosticado después de la contratación del seguro.

Incrementar el espacio físico entre personas para evitar la propagación de la enfermedad; es muy importante saber que esto no significa aislamiento.

Entre las acciones a tomar para prevenir el contagio están:

• Mantener al menos 1.5 metros de distancia entre personas
• Evitar el contacto al saludar de beso, de mano, etc.
• No sostener reuniones multitudinarias en espacios confinados

Minimizar síntomas, en cualquier caso, si tienes fiebre, tos y dificultad para respirar, trata de obtener atención médica lo antes posible para reducir el riesgo de desarrollar una infección más grave.

Automedicarse, al tomar antibióticos u otros medicamentos podemos esconder síntomas, lo más recomendable es que te acerques a un médico.

Mantente sano, bien hidratado, con una buena alimentación y buena actitud, conserva la calma e infórmate en medios oficiales para poder transmitirle a los demás lo correcto.

Aún no se sabe con certeza cuánto tiempo sobrevive específicamente el virus que causa el COVID-19 en una superficie, aunque se estima que es similar a otros coronavirus, lo que implica que pueden subsistir desde unas pocas horas hasta varios días, en función de las condiciones de temperatura, humedad y tipo de superficie, por lo que es indispensable limpiar y desinfectar tu espacio de trabajo frecuentemente.

Solo si presentas fiebre y síntomas de una enfermedad respiratoria, como tos seca o dificultad para respirar, dentro de los 14 días de haber estado en contacto con alguien a quien se le ha detectado el COVID-19.

Recuerda que solo una PCR te permite tener un diagnóstico certero.

Por su seguridad, te pedimos que no los lleves contigo al trabajo. Por su bien y el de todos, es fundamental guardar las medidas de prevención e higiene.

Con el objetivo de cuidar la salud y el bienestar de todos nuestros colaboradores, ya hemos implementado una serie de medidas en corporativos, tiendas, sucursales y puntos de contacto con nuestros clientes:

Hemos fortalecido las labores de limpieza y desinfección en todos nuestros centros de trabajo, cumplimos con las certificaciones y especificaciones que marca la autoridad.

Sí, es posible que te contagies más de una vez, por eso es sumamente importante que continúes con todas las medidas de prevención.

En caso de que una persona contrajera COVID-19, cuando se recupera genera anticuerpos que lo vuelven inmune al virus. Es decir, hasta ahora no se sabe que haya reinfección.

No hay evidencia que perros, gatos u otros animales puedan infectarse con COVID-19. Siempre es buena idea lavarse las manos después de estar en contacto con ellos porque pueden ser transmisores del virus.

Hoy en día no están permitidos los funerales o velorios con más de 15 personas para salvaguardar la sana distancia. Para los pocos asistentes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) sugiere mantener la sana distancia, el lavado de manos constantes y no tocar el cadáver.

Además recomienda que no interactúen directamente con el fallecido los mayores de 60 años, ni las personas vulnerables.

Por el momento no existe un riesgo conocido asociado al hecho de estar en la misma sala en la que se está velando el cuerpo de alguien que falleció a causa de COVID-19 o en su funeral.